Guyots, los montes submarinos que se alzan miles de metros desde el fondo del mar

Los guyots son gigantescas montañas que se alzan en algunos casos miles de metros desde el fondo del océano. Aquí te explicamos cómo se forman y todos los secretos que esconden estas increíbles formaciones geológicas.

Guyots oceano
Algunas de estas moles submarinas se alzan más de 3000-4000 m desde el lecho oceánico, albergando ecosistemas muy singulares.

En las profundidades del océano se levantan unas colosales formaciones geológicas que durante mucho tiempo fueron un gran misterio para la ciencia: los guyots. A grandes rasgos son grandes montañas submarinas cuyas cimas presentan una característica forma plana, recordando el conjunto al tocón de un árbol.

¿Cómo se descubrieron estas formaciones geológicas?

Los guyots fueron reconocidos por primera vez en 1945 por el geólogo estadounidense Harry Hammond Hess, considerado uno de los padres fundadores de la teoría de la tectónica de placas. Toda la teoría de la expansión del fondo oceánico se debe a este científico. Hess recopiló datos usando un equipo de ecosonda en un barco que comandó durante la Segunda Guerra Mundial.

Los datos mostraron que algunas montañas submarinas tenían cimas planas. Hess llamó a estas formaciones 'guyots' en honor a Arnold Henry Guyot, un famoso geógrafo suizo del siglo XIX. La información que recopiló el geólogo estadounidense reveló una serie de patrones reconocibles que podían asimilarse a las rayas de una cebra en estas formaciones.

Su estudio y mapeo han sido de gran importancia para comprender la historia geológica de los océanos, así como el proceso de formación y evolución de las montañas submarinas.

Estos patrones mostraban la disposición magnética de las rocas en función del campo magnético terrestre, y Hess pudo observar cómo algunas rocas estaban dispuestas con orientación contrarias a las de otra banda, lo que le llevó a pensar que el océano se estaba expandiendo. Gracias a estos descubrimientos, en 1968 pudo elaborarse la teoría de la tectónica de placas.

Antiguas islas volcánicas que se hundieron en las profundidades

Los guyots son volcanes submarinos que entraron en erupción en el pasado, creciendo hasta alcanzar la superficie. El suelo oceánico se va expandiendo y va dejando estas formaciones conforme el volcán sigue activo, alejándose del eje de la dorsal. Cuando esto sucede, la actividad volcánica termina y se va enfriando. Con el paso del tiempo, la erosión va arrasando la cima de la montaña.

La acción de las olas y el crecimiento de los arrecifes de coral tienden a formar una montaña con la parte superior plana. A medida que la litosfera sobre la que viaja el incipiente guyot se enfría lentamente, se vuelve más densa y se hunde más en el manto de la Tierra, a través del proceso de isostasia. Cuando el edificio volcánico queda de nuevo bajo la superficie, las corrientes continúan erosionándolo.

Una de las características de las cumbres de los guyot es que tienen una capa de roca carbonatada que se genera con el paso del tiempo por los arrecifes de coral y bivalvos de aguas poco profundas, cuando el monte submarino era una isla hace muchos millones de años. Algunos experimentan una reactivación volcánica que forma pequeños cráteres que se elevan entre 200 y 300 metros por encima de estas capas de carbonato y sedimentos de sus cumbres.

¿Cuántos guyots se conocen?

Hay casi 300 guyots conocidos en los océanos del mundo: el Pacífico Norte alberga más de 115, el Pacífico Sur cerca de 80, el Atlántico Sur 43, el océano Índico 28, el Atlántico Norte 8, el océano Austral seis y el mar Mediterráneo dos. No se ha descubierto ninguno en el océano Ártico, aunque uno se encuentra en el Estrecho de Fram, en el noreste de Groenlandia. Se han encontrado varios en tierras al quedar al descubiertos por descensos del nivel del mar.

Es habitual encontrarlos en grupos o formando parte de sistemas montañosos submarinos más grandes. El guyot de Yantarnaya, uno de los más grandes del planeta, se localiza en el océano Pacífico, formando parte de la cordillera submarina de Sala y Gómez. Los guyots tienen una superficie mucho mayor que los montes submarinos típicos, con una superficie media de más de 3300 km². Muchos de ellos miden más de 900 metros, e incluso algunos se levantan más de 4000 metros desde el lecho oceánico.

Santuarios para la vida marina amenazados por la actividad humana

Las cumbres planas y cubiertas de sedimentos proporcionan una mezcla de hábitats que no se encuentran en los montes submarinos cónicos, por lo que en los guyots podemos encontrar una enorme diversidad de fauna típica de aguas profundas que viven en ellos, por lo que son vitales para la ecología submarina.

Sin embargo, todavía se sabe muy poco sobre las comunidades que se asientan sobre estas formidables formaciones, por lo que en los últimos años se está fomentando su estudio y protección. Desgraciadamente, las cimas planas que hacen que estos montes submarinos sean únicos también facilitan su acceso a individuos no deseados, por lo que la pesca ilegal o la extracción de minerales son problemas bastante frecuentes.