Resuelven el misterio de los extraños "círculos de hadas" de Namibia

¿Extraterrestres? ¿Termitas? ¿O simplemente es la naturaleza? Un equipo internacional de científicos ha conseguido explicar el origen de los sorprendentes "círculos de hadas" encontrados en el desierto de Namibia.

Círculos de hadas Namibia
Los científicos han encontrado por fin una explicación al origen de los "círculos de hadas" de las llanuras de Namibia.

En el desierto de Namibia se encuentran los llamados "círculos de hadas". Son millones de agujeros circulares de unos pocos metros de diámetro, a unos 100 kilómetros de la costa atlántica.

Los científicos llevan décadas buscando el origen de estos círculos. Se han barajado varias hipótesis: insectos, sobre todo termitas, o simplemente las propias plantas, que se animan a crecer en círculos.

Esta última es la hipótesis más probable según un nuevo estudio. La investigación, publicada en Perspectives in Plant Ecology Evolution and Systematics, sugiere que unas determinadas plantas son las responsables de estos "círculos de hadas".

Así descubrieron lo que sucede en estos círculos

Para entender este fenómeno, los científicos analizaron los datos de dos temporadas de lluvias muy abundantes en 2020 y 2021. El equipo internacional de investigadores tomó muestras de la humedad del suelo en estos famosos círculos en puntos regulares tras el paso de las lluvias.

Examinaron la maleza en busca de posibles daños por termitas. Comprobaron que, justo después de la lluvia, empezaron a crecer pequeñas hierbas en el centro de los círculos. Pero murieron sólo 10 días después.

Mientras que las plantas que crecían alrededor de los "círculos de hadas" permanecían verdes y sanas. Y lo más importante, no había pruebas de que las termitas fueran las responsables de las plantas muertas.

Las plantas que crecían fuera de estos círculos permanecían sanas. Las que crecían dentro, morían a los pocos días.

"La brusca ausencia de hierba en la mayoría de las zonas dentro de los círculos no puede explicarse por la actividad de las termitas, ya que no había biomasa para que estos insectos se alimentaran", explica el Dr. Stephan Getzin, del Departamento de Modelización de Ecosistemas de la Universidad de Gotinga (Alemania) y autor principal del estudio.

"Pero lo más importante es que podemos demostrar que las termitas no son las responsables porque las hierbas mueren inmediatamente después de la lluvia sin que haya señales de animales que se alimenten de las raíces".

Una vez descartadas las termitas, los investigadores centraron su atención en la propagación del agua. "Con el fuerte calor de Namibia, las hierbas transpiran constantemente y pierden agua. Como resultado, crean vacíos de humedad en el suelo alrededor de sus raíces y el agua es atraída hacia ellas", dice el Dr. Getzin.

"Nuestros resultados coinciden con los de los investigadores que han demostrado que el agua del suelo se difunde rápida y horizontalmente en estas arenas incluso a distancias de más de siete metros". Los científicos creen que las plantas se autoorganizan para crecer en parches circulares, lo que les permite compartir el agua de forma adecuada.

"Al formar paisajes con un gran patrón de círculos de hadas regularmente espaciados, las hierbas actúan como ingenieros del ecosistema y se benefician directamente de los recursos hídricos proporcionados por los vacíos de vegetación", señala el Dr. Getzin.

"De hecho, conocemos estructuras de vegetación autoorganizadas relacionadas en otras zonas áridas del mundo, y en todos estos casos, las plantas no tienen otra posibilidad de sobrevivir que creciendo precisamente en estas formaciones geométricas", explica Getzin.