El otro 'Caminito del Rey' de Andalucía: está en Granada y su espectacular ruta es gratis

En el norte de la provincia andaluza, este sendero ofrece un espectacular recorrido entre desfiladeros, cañones y pasarelas colgantes. Un paraíso natural poco conocido, gratuito y sin masificaciones, que recuerda al famoso camino malagueño, pero en versión salvaje.

Uno de los tramos del Sendero de las Cerradas. Foto: Ayuntamiento de Castril.

Cuando se piensa en rutas trepidantes y paisajes de vértigo en Andalucía, la primera que suele venir a la cabeza es el famoso Caminito del Rey, en Málaga, que el año pasado fue visitado por más de 300.000 personas.

Sin embargo, no es, ni mucho menos, la única opción. Escondido entre las montañas del norte de la provincia de Granada, existe un sendero mucho menos conocido, pero igualmente impresionante: el de las Cerradas. Una joya natural gratuita, sin masificaciones ni taquillas.

Recorrer sus pasarelas colgadas y contemplar sus desfiladeros y la naturaleza virgen que lo envuelve es vivir una experiencia única de senderismo.

¿Dónde está el sendero de las Cerradas?

Este increíble recorrido natural se encuentra entre los municipios granadinos de Castril y la Puebla de Don Fadrique, en pleno corazón del Parque Natural de la Sierra de Castril.

Un entorno es ideal para una escapada de fin de semana, si lo que se busca es contacto directo con la naturaleza sin sufrir aglomeraciones ni los impactos negativos del turismo de masas.

La duración aproximada de la ruta circular es de una hora y el nivel de dificultad es fácil (aunque hay tramos con escaleras y zonas sin barandilla), lo que lo convierte en una actividad ideal para senderistas, familias y fotógrafos de naturaleza.

¿Por qué se le compara con el Caminito del Rey?

El sendero de las Cerradas recuerda al Caminito del Rey por sus pasarelas suspendidas, cañones encajonados, desfiladeros esculpidos por la fuerza del agua a lo largo de miles de años y la espectacularidad de sus vistas.

Uno de sus tramos más icónicos es la Cerrada del Río Castril, un estrecho desfiladero por el que discurre una pasarela de madera sobre su curso. Aquí, El sonido del agua y las paredes verticales de roca crean una verdadera atmósfera de aventura.

La Cerrada de la Magdalena y la Cerrada del Río Castril ofrecen un recorrido de puentes colgantes, túneles y tramos tallados en la roca que rivalizan con los tramos más espectaculares del Caminito malagueño.

Y lo mejor: el acceso es libre y gratuito durante todo el año, sin necesidad de reserva previa ni compra de entradas.

Naturaleza virgen sin aglomeraciones

Una de las mayores ventajas del sendero de las Cerradas es su bajo nivel de masificación. Aunque está cada vez más presente en blogs de viajes y redes sociales, sigue siendo un secreto bien guardado para muchos viajeros.

Se trata de un plan perfecto para quienes buscan alternativas al turismo más comercial, donde el sonido del agua y el canto de los pájaros sustituyen al bullicio del turismo organizado.

Restos visitables del castillo de Castril. Foto: Empresa Pública para la Gestión del Turismo y del Deporte de Andalucía.

Un escenario natural rodeado por vegetación autóctona y fauna silvestre como nutrias, águilas o buitres leonados.

El recorrido, aunque breve, es ideal para complementar con otros planes en la zona: visitar el yacimientos del castillo de Castril (siglo XI), su Centro de Interpretación de la Naturaleza, o realizar rutas más extensas por este bello parque natural.

¿Cómo llegar a la ruta?

Desde Granada capital, en coche se llega en unas dos horas por la A-92 en dirección a Baza y luego siguiendo hacia Castril. El acceso al sendero, situado junto al río, está bien señalizado y suele haber aparcamiento cercano.

También es posible acceder desde Jaén o Murcia, lo que lo convierte en una excelente opción para viajeros que vivan en el sureste peninsular.

Para quienes se decidan por planear un viaje al sendero de las Cerradas en Castril que incluya pernoctaciones, existe una variedad de opciones de alojamiento que se adaptan a diferentes preferencias y presupuestos.

Alojamientos y casas rurales, cortijos, hoteles ecológicos e incluso campings, ofrecen todas las comodidades para disfrutar de la experiencia.