Toboganes térmicos y baile de anticiclones para la próxima semana

No se alejará de nosotros, pero los incipientes movimientos del anticiclón permitirán el paso de masas de aire a diferentes temperaturas que serán bastante destacables a corto y medio plazo.

Los contrastes térmicos, además de entre el día y la noche, serán muy marcados dependiendo del día de la semana. Alternaremos días de fuertes heladas nocturnas con otros plenamente primaverales.

En estos últimos días ya hemos percibido algunos cambios en las temperaturas que han llegado a ser muy notables. Tras un final de enero con valores térmicos normales y abundantes heladas nocturnas, febrero ha llegado con un ascenso térmico importante. Se han llegado a alcanzar valores de récord, como el del observatorio del Puerto de Navacerrada, que con 16,8 ºC igualó la máxima absoluta para este mes del año. Sin embargo, durante este fin de semana las temperaturas volverán otra vez a bajar notablemente y es de esperar que estos cambios continúen de cara a la semana que viene.

El anticiclón no se separa de la Península Ibérica, pero el bloqueo situado en las Británicas durante buena parte del mes de enero ha desaparecido y en su lugar se ha desarrollado una amplia dorsal anticiclónica más al sur y con algo menos de sustento cálido en altura, dando lugar a un área amplia de geopotenciales altos pero mucho menos definida que en semanas anteriores. Esto se traduce en una mayor movilidad del anticiclón, permitiendo que se desplace e incluso que presente ciclos en los que se debilite o desaparezca para ser reemplazado rápidamente por otro.

En principio estos centros de altas presiones no se van a alejar de la Península Ibérica, por lo que las perspectivas a medio plazo siguen siendo muy pobres en lo que respecta a las precipitaciones. Sin embargo, el constante cambio de posición de estos centros de acción permitirá que nos alcancen masas de aire distintas y con recorridos bastante variados, como ya ha empezado a suceder esta semana.

Heladas más intensas al principio y al final de la semana

Una de las consecuencias que tendrá esta situación es que a mediados de semana, un nuevo centro de altas presiones cruzará de oeste a este la Península Ibérica induciendo una fuerte situación de subsidencia de la masa de aire. Esto significa que el aire templado de niveles medios descenderá, comprimiéndose adiabáticamente y calentándose, dando lugar a un nuevo episodio de temperaturas elevadas. Este evento no será tan marcado como el de estos primeros días de febrero, pero hará subir las temperaturas el martes y el miércoles.

Heladas
La madrugada del lunes será una de las más frías de la semana, a la espera del descenso de temperaturas que se intuye unos días después.

Las heladas por tanto serán más intensas al principio de la semana, tras la irrupción fría de estos próximos días, siendo más débiles y aisladas posteriormente. Además se notará un considerable ascenso de las temperaturas máximas según avancen los primeros días de la semana, lo que condicionará mucho el carácter cálido, a parte de seco, de la semana. Sin embargo, en los últimos días, este anticiclón móvil se alejará hacia el este y un nuevo centro de altas presiones se situará al noroeste de la Península.

Esto podría traducirse en una advección anticiclónica de noreste a partir del viernes 11 que facilitará un nuevo descenso de las temperaturas. La escasa humedad y la ausencia de nubes facilitará que las temperaturas nocturnas bajen y las heladas se propaguen de nuevo. No obstante, queda mucho todavía para saber si esta movilidad de los centros de altas presiones y la menor definición de la dorsal que los sustenta puede en un futuro permitir la entrada de algún sistema frontal que pueda dejar precipitaciones, de momento no parece probable durante esta próxima semana.