¿Qué es el bochorno?

Llegan los meses cálidos y oímos con frecuencia la palabra bochorno en los informativos y en el espacio dedicado al tiempo. A continuación damos unas pinceladas sobre este concepto térmico que destila sofoco.

Bochorno
En estas fechas se utiliza mucho la palabra bochorno pero se desconoce su significado real.

Según la RAE, bochorno proviene del latín. vulturnus o 'viento del este'. Seguidamente la RAE viene a decir en su primera acepción que bochorno es “Aire caliente y molesto que se levanta en el estío”. Aíre cálido que causa molestias y sofocos durante el verano. También la RAE alude a “Calor sofocante” o su equivalente a muy altas temperaturas.    

Por lo tanto, el bochorno se refiere a situaciones donde la temperatura es muy alta, molesta y sofocante, que se da preferentemente en los meses de verano y algunos más, cuando las temperaturas se disparan sobre los 35 ºC. No es de extrañar que en Sevilla, cuando las temperaturas a la sombra llegan a los 38 ºC y se abre la ventana de la casa, se oiga decir “vaya bochorno que hace”  equivalente a altas temperaturas o calor que causa molestias para desarrollar actividades humanas normales. En Andalucía se habla de bochorno cuando en verano hay situaciones de aire del sur de origen africano que elevan las temperaturas más allá de los 38-40ºC de forma persistente.

En Canarias las situaciones de bochorno van acompañadas en verano de entradas del este, con aire africano muy cálido, seco y sofocante. Muchas veces el bochorno canario va acompañado de calima. En el Valle del Ebro las situaciones de bochorno van acompañadas en verano con entradas de viento de componente SE.  

Pero no hace falta irse tan lejos en esas temperaturas. Las molestias térmicas pueden venir generadas por temperaturas algo más bajas  y con altos contenidos de humedad, típicas del verano en las costas levantinas u otras zonas.  

De aquí que la temperatura y humedad se unan para dar una temperatura ligada a la sensación térmica, o su índice asociado, que refleja qué temperatura percibe el ser humano en su el cuerpo, de acuerdo a un cálculo que combina la humedad relativa y la temperatura del ambiente en los meses cálidos.  

Los altos índices de humedad incrementan la sensación de calor y, por tanto, el bochorno.

Cuando la humedad relativa es muy alta, se reduce la proporción de la evaporación de nuestro cuerpo, y no disminuye la temperatura de él por el enfriamiento de la evaporación del sudor, que nos robaría calor. Por eso a 25ºC y valores del 80-90% de humedad se experimenta una sensación molesta de más calor.

A veces se habla de la temperatura de bochorno o índice de bochorno cuando se combina la temperatura y humedad, que no es más ni menos  que la sensación térmica comentada con anterioridad y que se calcula con unas formulas determinadas.

Los alivios en el bochorno provienen de una bajada de temperatura o humedad. El aumento de la velocidad del viento horizontal, alivia la sensación molesta del bochorno, siempre que el aire sea más fresco y no tenga aporte de más humedad.

Por lo tanto, el bochorno está asociado a temperaturas muy altas o situaciones de temperaturas algo más bajas pero con alto contenido de humedad, que causan molestias y sofocos en las actividades humanas cotidianas. También se puede hablar de bochorno como una situación de calor sofocante, agobiante y molesto donde el viento está en calma o es muy débil.  En términos generales, la definición de bochorno no debería estar ligada a la dirección un origen único del viento. Cada región española puede tener una “situación de bochorno” con direcciones de viento diferentes en cada una de ellas. El bochorno en las ciudades se ve acentuado por el efecto de “isla de calor” que tiene las grandes urbes respecto a las zonas de campo circundante.