Más de 270 científicos rechazan el deslinde que amenaza Doñana: "ignoran que es un humedal de agua dulce"
Casi 300 expertos han firmado un manifiesto coordinado por WWF para exigir al Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico que suspenda el deslinde aprobado sobre el humedal, que considera que las marismas son de agua salada y no dulce.

El Parque Nacional de Doñana, uno de los ecosistemas más emblemáticos de Europa y uno de los humedales de agua dulce más valiosos del planeta, vuelve a estar en el centro de una controversia ambiental de gran calado.
Más de 270 científicos y científicas pertenecientes a instituciones de investigación, universidades y al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) han firmado un manifiesto coordinado por WWF España en rechazo al deslinde aprobado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO).
Su argumento principal es contundente: este deslinde, que reclasifica gran parte de la marisma como marismas mareales —es decir, influenciadas por las mareas y no por aguas dulces—, representa una grave amenaza para la integridad ecológica del humedal.
Un deslinde sin base científica
El deslinde cuestionado, aprobado por la Dirección General de la Costa y el Mar, redefine al menos dos tercios de la marisma de Doñana como zonas que quedarían bajo la influencia de las mareas del estuario del Guadalquivir.

Con ello, dichos espacios dejarían de considerarse humedales de agua dulce y pasarían a clasificarse como marismas mareales inundables, una interpretación que, según el manifiesto, contradice décadas de investigación científica.
Los firmantes alertan de que esta reclasificación ignora la evidencia empírica acumulada sobre el origen pluvio-fluvial de las marismas de Doñana, que dependen fundamentalmente de las precipitaciones y de aportes de agua dulce para mantener sus funciones ecológicas.
Estos humedales no sólo sustentan una biodiversidad excepcional —con especies migratorias que conectan Europa y África— sino que también desempeñan un papel crucial en la regulación hidrológica y climática de la región.
La ciencia en el corazón del debate
El manifiesto exige a la ministra Sara Aagesen que “escuche a la ciencia” y suspenda inmediatamente el deslinde aprobado, proponiendo en su lugar la constitución de un comité científico-técnico independiente que elabore una nueva propuesta basada en el conocimiento científico acumulado sobre Doñana.
Doñana en peligro, otra vez!
— WWF España (@WWFespana) December 11, 2025
Rechazo unánime y contundente de la ciencia al deslinde que amenaza #Doñana
Más de 270 científicos/as de toda España lo rechazan y piden a la Ministra Sara Aagesen que lo suspenda y que @mitecogob elabore uno nuevo, basado en la ciencia, que no pic.twitter.com/3xySpERVpw
Esta solicitud implica que las decisiones administrativas que afectan a uno de los espacios naturales más protegidos y reconocidos de España se deben apoyar en criterios técnicos y evidencia sólida, y no en interpretaciones geográficas o administrativas que consideran cuestionables.
Por su parte, el secretario general de WWF España, Juan Carlos del Olmo, ha enfatizado que rechazar el deslinde no es una mera postura conservacionista, sino una defensa fundamentada del funcionamiento ecológico real de Doñana.
Según del Olmo, la interpretación usada por el Ministerio refleja un “grave desconocimiento” de los procesos hidrológicos y ecológicos que han sostenido este humedal durante milenios.
Consecuencias ecológicas y legales
Más allá del debate técnico, los científicos advierten que reclasificar las marismas podría tener “consecuencias irreversibles”. La pérdida de humedales de agua dulce —ya de por sí escasos y amenazados en toda Europa— pondría en riesgo no solo la biodiversidad, sino también los servicios ecosistémicos que estos sistemas proporcionan: desde la retención de carbono hasta el filtrado de nutrientes y la mitigación de inundaciones.

El deslinde también ha recibido el rechazo mayoritario del Consejo de Participación de Doñana, un órgano colegiado que representa a múltiples actores implicados en la gestión del espacio protegido, y que informó negativamente sobre la propuesta en una sesión extraordinaria. Un rechazo institucional que subraya la falta de consenso técnico y social sobre la medida.
Además, WWF España ha presentado un recurso de reposición contra la resolución del deslinde, que deberá ser resuelta por la ministra antes del 13 de diciembre, lo que añade una dimensión jurídica al conflicto.
Protecciones internacionales en juego
La importancia global de Doñana está reconocida más allá de las fronteras españolas. El Parque Nacional es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, Reserva de la Biosfera y Sitio Ramsar, un estatus que subraya su valor como uno de los humedales más importantes del mundo.
Por eso, la clasificación errónea de sus marismas no solo amenaza la biodiversidad local, sino que pone en entredicho el cumplimiento de compromisos internacionales de conservación y gestión sostenible de ecosistemas.
En un contexto de creciente presión sobre los recursos hídricos y los ecosistemas naturales, la defensa de Doñana como humedal de agua dulce no es solo un asunto local o nacional, sino un símbolo de la lucha por la preservación de los ecosistemas más vulnerables frente a decisiones administrativas que no respetan la evidencia científica disponible.
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