Martes tormentoso: desde líneas de turbonada hasta granizadas

Desde hace días veníamos siguiendo un embolsamiento de aire frío presente en las capas altas de la troposfera, por mostrar cierta tendencia a acercarse y tener potencial para dejar tormentas muy fuertes. Su nombre técnico no da buena espina: DANA. Desde ayer está sobre la Península Ibérica multiplicando la inestabilidad atmosférica y dando lugar a núcleos tormentosos cada vez más potentes.

Un conglomerado de estos cumulonimbos (tormenta multicelular) en las últimas horas ha enfilado la provincia de Zaragoza trazando una espectacular línea de turbonada. En La Muela, un municipio que dista apenas unos kilómetros de la capital maña, las nubes han dejado una espectacular cascada de precipitación.

Este tipo de estructura tormentosa es severa casi por definición. Las líneas de turbonada suelen presentar fuertes rachas viento, lluvias muy intensas y granizadas, todo esto concentrado en apenas unos minutos, porque son de paso rápido. Pero vaya si les cunde. En San Javier, una localidad el extremo sureste de la Región de Murcia, no ha hecho falta una gran tormenta para que el pedrisco hiciera acto de presencia. A tenor de las imágenes, parece que los granizos han rondado los 2 centímetros de diámetro.

No es la única tormenta intensa que se ha vivido en las últimas horas. Ya se han registrado muchas y esta tarde podrían registrarse otras tantas, pero concentradas ya sobre todo en el cuadrante noreste de la Península. Por eso siguen vigentes un sinfín de avisos por tormentas y lluvias que se extienden por casi toda la mitad norte y este peninsular. Hay más de 10 millones de personas expuestas a los riesgos.

Esta noche los chubascos remitirán, mientras sobrepasan Cataluña camino del sur de Francia. Después tendremos un día de impás, el de mañana, con tormentas intensas en el Cantábrico oriental. Entre el viernes y el sábado habrá un segundo episodio de inestabilidad que incluso podría ser aún más severo y extenso que el actual.