El inquietante impacto del volcán Hunga Tonga si hubiera estado en Madrid

Su explosión, sin precedentes del siglo XXI, puso en alerta a todo el planeta. El volcán Hunga Tonga-Hunga Ha’pai se despertó hace un año para ser la erupción más fuerte de los últimos 30 años. Aquí te contamos todo lo que se sabe hasta el día de hoy.

La erupción del gigante submarino

En diciembre de 2021, el volcán submarino Hunga Tonga-Hunga Ha’pai, llamado así por las dos islas que se asientan en su borde, se despertó en una serie de estallidos que perpetuaron al día 15 de enero de 2022 en la historia. Esa misma jornada se desató una explosión tan fuerte que el ruido se llegó a escuchar desde Alaska, a unos 10.000 kilómetros de distancia. Aquí está la recreación del sonido más grande del siglo XXI.

Fue tan vasta la erupción que se excavaron hasta 10 kilómetros cúbicos de roca que luego se arrojaron a la atmósfera a una distancia de 58 kilómetros, según el Instituto de Geociencias. El despertar del Hunga Tonga provocó un tsunami de 15 metros que se estrelló contra la costa de Tonga, Fiyi y Samoa, destruyendo todo lo que encontraba a su paso, poblaciones y animales.

Explosiones y una enorme columna volcánica

Aunque el volcán lleva entrando en erupciones esporádicas desde 2009, no fue hasta hace justo un año cuando generó la más extrema, provocando ondas de choque atmosféricas, estampidos sónicos, tsunamis y una columna de vapor de agua capaz de llenar 58.000 piscinas olímpicas que se disparó a la estratosfera.

Un equipo de científicos publicó recientemente un estudio en la revista Nature que recoge todo esto. En él demostraron un aumento sin precedentes en la masa de agua estratosférica global en un 13 %, en relación con los niveles climatológicos. También un aumento de hasta cinco veces en la carga de aerosoles.

Debido a la altitud extrema, la columna volcánica circunnavegó la Tierra en solo una semana y se dispersó casi de polo a polo en tres meses. Cantidades suficientes como para provocar un calentamiento en la superficie terrestre.

La verdadera dimensión de la explosión

Varios satélites de observación de la Tierra recopilaron datos antes, durante y después de la explosión. También, científicos de la ESA utilizaron los datos casi instantáneos de la misión Aeolus para rastrear la erupción casi a tiempo real. Gracias a esos registros se determinó que la ceniza volcánica debió haber alcanzado una altitud por encima del rango Aeolus, que era de 21 kilómetros.

La naturaleza y magnitud calculadas de esta erupción volcánica ubican a Hunga Tonga entre los eventos naturales más notables de la era de la observación moderna.

Sobre estas líneas hay una recreación publicada ayer en Twitter por IGEO (CSIC-UCM) que se hizo viral. En la animación se muestra la proporción que habría tenido la columna eruptiva de haber estado el volcán situado sobre la ciudad de Madrid. El cielo hubiera estado cubierto de cenizas y materiales volcánicos desde la capital española hasta las inmediaciones de Portugal, Murcia y la cordillera Cantábrica. Una nube con más de 500 kilómetros de diámetro cubriendo el cielo azul. Alucinante.