Concurso Meteoreportaje´2014: segundo clasificado
Presentamos el trabajo del 2º clasificado Rubén del Campo Hernández con sus diez primeras fotos
Los clasificados de Concurso Meteoreportaje'2014 de la AME son:
1º premio: "Meteomagia", por José Luis Escudero Gallegos
2º premio: "Diez instantes", por Rubén del Campo Hernández
3º premio: "Energía desatada", por David Mancebo Atienza
Presentamos el trabajo del 2º clasificado Rubén del Campo Hernández con sus diez primeras fotos
SEGUNDO PREMIO: "Diez instantes"
Por Rubén del Campo Hernández
A la hora de abordar la elaboración de este meteoreportaje, decidí elegir diez instantes que fueran capaces de resumir, en lo meteorológico, el legado del año 2014 en Tenerife. Los presento sin ningún orden establecido, de la misma manera que la atmósfera nos sorprende con sus bruscas variaciones.
En los atardeceres invernales la sombra del Teide suele proyectar sobre el mar de nubes típico de Canarias.
En esta ocasión lo hizo, además, en una atmósfera cargada de calima.
Este litometeoro, la calima, no es bien recibido en Canarias porque en verano aumenta el riesgo de incendios y en invierno reduce la visibilidad y causa trastornos respiratorios en personas sensibles. Pero la calima, con sus juegos de luces y sombras, también puede ser hermosa.
El Teide y Tenerife en su conjunto son obstáculos orográficos de gran tamaño capaces de interferir en el flujo de viento formando nubes onduladas. No es el caso de los cirros de la imagen, en cuyas curiosas formas quizás influyeron islas lejanas, como La Palma o incluso Madeira.
El Pico Viejo, que con sus 3.135 metros es la segunda montaña más alta de Canarias, fue el responsable de la formación de esas delicadas “nubes fantasma” que lo coronan, denominadas así por su aspecto espectral y por la rapidez con la que cambian de forma.
Numerosas nubes orográficas hacen su aparición sobre el Este de Tenerife, como avanzadilla de un cambio de tiempo que tuvo lugar horas después. La isla en su conjunto interfirió con el flujo de viento dando lugar a este lienzo caótico como las leyes que rigen la atmósfera.
Estas “nubes fantasma” con iridiscencias (las bandas coloreadas que se observan en sus bordes) se formaron gracias a la interacción de tres elementos: la atmósfera, la luz del sol y la orografía.
Unos finos estratos que se desplazaban a gran velocidad y a poca altura interfirieron con la luz del sol formando este fotometeoro, que en ocasiones también puede verse alrededor de la luna.
Esta nube rotor de aspecto amenazador nos recuerda la doble cara de la Naturaleza: es muy hermosa, pero a la vez feroz. Pocas horas después de su formación una violenta lluvia torrencial azotó la ciudad de Santa Cruz de Tenerife.
La capital de Tenerife recibe la mayor parte de sus lluvias pocos días al año, generalmente en otoño e invierno. Aquí tenemos una vista parcial de la ciudad tamizada por los colores de un espectacular arcoíris supernumerario.
Este es el aspecto del jardín meteorológico del Observatorio de Izaña después de un fuerte temporal de nieve y hielo que tuvo lugar a mediados de febrero.
Espero que las fotografías de este “meteoreportaje” no hayan dejado a nadie helado.
Coordina: Fernando Bullón Miró
Fuente: AME