El volcán de La Palma sigue sorprendiendo tras arrasar 1000 hectáreas

Tras casi dos meses expulsando lava sin cesar, el volcán de Cumbre Vieja sufre un repunte en su actividad sísmica que, según los expertos, podría haber roto la tendencia decreciente que había empezado mostrar. ¿Hay perspectivas de que acabe a corto plazo?.

La sismicidad profunda ha vuelto a aumentar en los últimos días: ¿repunte puntual o reccarga del sistema?

La erupción iniciada el pasado 19 de septiembre en Cumbre Vieja ha experimentado un aumento en la sismicidad profundad en las últimas horas, tanto en número como en magnitud. Es por ello que los expertos vigilan si este incremento, junto con el crecimiento en las emisiones de dióxido de azufre, podrían suponer un repunte puntual o quizás, terminar con la tendencia de debilitamiento registrado en las últimas semanas.

Mientras tanto, la lava expulsada por el volcán ha destruido, de momento, 2.724 construcciones y cubre una superficie de más de 1.000 hectáreas, de las cuales casi 300 pertenecen a cultivos: 164,38 son plataneras, 59,84 viñas y 24,75 aguacates. Este nuevo repunte podría suponer una reactivación del volcán y con ello, más hectáreas afectadas, más medios de vida destruidos y más personas evacuadas que, hasta el momento, alcanzan la cifra de 467 vecinos.

Aumento de la sismicidad profunda

La sismicidad en la isla de La Palma a niveles someros e intermedios se mantiene bajo respecto a días anteriores, pero han aumentado los seísmos a profundidades superiores a los 20 kilómetros en los últimos días. La pasada madrugada del jueves se produjo un terremoto de magnitud 5 localizado a 35 km a las 3:35 UTC, el mayor desde hace 15 días y uno de los más intensos de toda la serie. Recordemos que el más potente fue registrado el 30 de octubre con una magnitud de 5,1, aunque los geólogos no descartan que puedan producirse algunos de mayor magnitud.

Este seísmo de gran magnitud junto al incremento de concentración de dióxido de azufre, entre 31.000 y 43.000 toneladas en 24 horas, preocupa a los científicos por la posible reactivación del volcán, alejando más la fecha en la que erupción llegue a su final.

La Palma continúa creciendo con la nueva fajana

Además del aumento de los seísmos y la mala calidad del aire, la otra gran novedad de la erupción de La Palma ha sido la nueva desembocadura al océano Atlántico de una colada lávica.

El pasado miércoles, la colada de lava de la zona 2 alcanzó el mar en la playa de Los Guirres, donde ha comenzado a formarse una un nueva fajana que se superpone por el norte con la anterior. Los técnicos creen que es probable que esta colada se una a la primera fajana formada a finales de septiembre.

¿Cuánto podría durar la erupción?

Los expertos advierten que no pueden ser claros al hablar de un final de erupción y esperan que lo ocurrido durante los últimos días sean episodios puntuales. También han explicado que para dar una respuesta contundente sobre la inminente evolución del volcán, es necesario esperar a los próximos días para que los parámetros concluyan si se trata de una reactivación puntual o si es una recarga del sistema.

La actual erupción ha superado la duración media de las erupciones históricas de La Palma, siendo además la más destructiva. De momento, no hay perspectivas de que acabe de forma inminente.

Además, se ha de tener en cuenta el pasado geológico de la isla para estimar el posible final de esta nueva erupción. Las erupciones históricas mas recientes en la isla de La Palma fueron las del Teneguía en 1971, con 24 días de duración, la de San Juan en 1949, más de 40 días, y la de El Charco en 1712, con 56 días. De acuerdo con los datos disponibles, INVOLCAN calculó que la duración media era unos 55 días, con un máximo de 85 días y un mínimo de 24. De momento, ya hemos superado la media, y veremos si se alcanza el máximo de la serie con 85 días de erupción, un escenario poco deseable.