Eolometeoros. Descripci�n te�rica. .

Es el componente individual m�s espectacular de la m�qui�na del tiempo terrestre, un enorme sistema meteorol�gico en espiral que contiene vientos de enorme intensidad y grandes bancos de nubes productoras de las precipitaciones m�s fuertes conocidas en la Tierra.

Ilustr. 1. Estructura de un cicl�n tropical. Fuente: Fernando Llorente Mart�nez. Publicada en la RAM. Cap�tulo 10. Los fen�menos violentos.
El cicl�n tropical se desarrolla gracias a la evaporaci�n intensa de la superficie del mar. El aire caliente y h�medo se inestabiliza, gener�ndose fuertes corrientes ascendentes que dan lugar a una r�pida condensaci�n del vapor de agua. Se producen intens�simas precipitaciones y vientos huracanados que giran alrededor del ojo del cicl�n.

Fig.1 Realizada por Fernando Llorente Mart�nez. Cap�tulo X Fen�menos violentos, publicado en la RAM.

Para que estos enormes sistemas tormentosos se desarrollen necesitan dos requisitos b�sicos, calor y humedad. A consecuencia de ello, s�lo se desarrollan en los tr�picos, entre las latitudes 5 y 20 grados Norte y Sur del Ecuador, y en regiones donde la temperatura del mar es superior a 27 grados cent�grados. Normalmente se mueven, primero en direcci�n oeste y luego se alejan del ecuador, bien para entrar en los continentes y causar enormes destrozos, o bien para continuar su camino por el oc�ano hasta encontrar aguas m�s fr�as y extinguirse por s� mismos o convertirse en una simple borrasca. Su mayor frecuencia tiene lugar en verano o principios de oto�o del hemisferio respectivo. Seg�n su localizaci�n reciben diversos nombres, en Filipinas "baguios", en China "tifones" y en las Antillas "huracanes".

Las �nicas regiones del mundo donde se producen ciclones tropicales son: el mar de la China, la costa occidental de Am�rica Central, el golfo de Bengala, la regi�n de Madagascar y la regi�n de Samoa y Nuevas H�bridas.

Tienen un di�metro que puede alcanzar los 600 kil�metros, con viento que circula girando en espiral hacia el centro con velocidad aproximada de 250 kil�metros a la hora, pero que en ocasiones supera los 300 kil�metros a la hora. Van acompa�ados de fuertes precipitaciones, con cantidades que var�an entre los 80 y los 150 mil�metros a la hora.

En su regi�n central se observa una zona de calma, llamada ojo del cicl�n. C�mo en esta zona se produce un descenso del viento desde la parte m�s alta de la nube, hace un efecto de secado en las capas atmosf�ricas inferiores, produciendo vientos flojos, aumento de la temperatura y de la presi�n y cielos pr�cticamente despejados. Suele medir unos 25 kil�metros de di�metro, aunque puede llegar a los 70 � m�s en tormentas muy amplias.

Consiste en una masa de aire inestable, girando furiosamente y elev�ndose r�pidamente alrededor del centro de un �rea de baja presi�n atmosf�rica. Se le ve como un torbellino largo y estrecho, a modo de una "chimenea", que va desde una nube de tormenta hasta el suelo o muy cerca de �l. Son t�picos en Norteam�rica y la �poca m�s propicia para su aparici�n es el comienzo del verano.

En t�rminos de violencia concentrada y destructiva, ninguna otra tempestad atmosf�rica tiene comparaci�n con el tornado. Generalmente tienen un di�metro inferior a un kil�metro aunque muchas veces apenas llegan a los 100 metros. No suelen estar acompa�ados de abundantes precipitaciones, pero si de fort�simos vientos, con velocidades que pueden superar los 350 kil�metros a la hora. Suelen desplazarse a una velocidad media de unos 40 km/h.

Sin embargo, no es el viento la �nica fuerza destructora del tornado. La presi�n en el centro de la tormenta es extremadamente baja, de modo que cuando el tornado pasa por un punto determinado hay una repentina ca�da de la presi�n. Si esto sucede sobre un edificio, el resultado es que la presi�n dentro de �l de repente es mucho mayor que la exterior; el edificio "explota" en el sentido literal de la palabra.

Adem�s, existen violentas corrientes de aire ascendente, que pueden superar los 200 kil�metros a la hora y que son suficientemente fuertes como para levantar el ganado y a las personas, transport�ndolos a grandes distancias. No es de extra�ar que en algunas zonas donde estas tempestades son frecuentes se produzca la "lluvia de ranas", fen�meno que sucede cuando el tornado pasa por alg�n estanque absorbe el agua y todo lo que se encuentre en �l, transport�ndolo hasta la nube y posteriormente con la precipitaci�n vuelve al suelo.

Finalmente indico una serie de precauciones en caso de estar cerca de un tornado, que nos pueden ayudar a mitigar los da�os o las desgracias que pueden causar:

1) Buscaremos un refugio cubierto, preferentemente s�tanos o, de no contar con sitios subterr�neos, la planta m�s baja de un edificio s�lido.

2) Nos alejaremos de las ventanas que ofrecen menor resistencia al viento que las paredes.

3) Si la anticipaci�n de la alarma nos lo permiti� y en la casa existen vidrios sin persianas, adheriremos sobre ellos papeles con una buena cantidad de pegamento � cinta adhesiva, que impida, si los vidrios estallan, que se diseminen sus trozos y nos hieran.

4) Elegiremos para guarecernos, cuartos interiores, en especial, peque�os ba�os o guardarropas.

5) Para evitar las diferencias de presi�n, podemos dejar abiertas algunas ventanas de la casa que den al lado opuesto del tornado.

7) No nos refugiaremos en construcciones amplias, como gimnasios o salas de espect�culos, ya que sus techos, de gran superficie, ofrecen poca resistencia al tornado.

Cuando el tornado se origina en el mar en vez de en tierra firme, se le denomina tromba marina. Son m�s peque�as que los tornados, su di�metro es del orden de unos 100 m., y su altura alrededor de los 1.000. Van acompa�adas de grandes precipitaciones. Son t�picas de los mares c�lidos, aunque no es extra�o que se la vea por nuestras latitudes.

El fen�meno suele desarrollarse de la siguiente forma: En un punto de la superficie inferior de un cumulonimbus se ve aparecer una protuberancia a modo de bolsa colgante, donde se desarrollan violentos movimientos de rotaci�n o torbellino. Poco a poco se va prolongando y afilando su punta, que toma forma de un cono invertido muy prolongado. A su vez, y exactamente debajo del v�rtice del cono, se observa una agitaci�n grande la superficie del mar, se forma abundante espuma, y surge de la superficie una columna ascendente. El cono nuboso se prolonga y se acorta, pero siempre descendiendo cada vez m�s hasta llegar a soldarse con el cono marino inferior. Es en este momento cuando consideraremos constituida la tromba marina. El meteoro se desplaza en la direcci�n del viento dominante.

No suele tener una vida muy larga y por tanto no recorre grandes distancias, normalmente se rompe y es recogida por la nube siguiendo un proceso casi exactamente inverso al de su formaci�n. Debajo de un mismo cumulonimbus se pueden formar varias trombas sucesivamente, incluso simult�neamente.

Son muy destructivas y peligrosa para la navegaci�n. Cuando una tromba marina penetra en tierra, se llamar� tromba terrestre de agua. Su vida en estos casos suele ser m�s corta todav�a y no recorre grandes distancias; la abundancia de la precipitaci�n cesa pronto y debido al rozamiento que as u paso van oponiendo todos los obst�culos pierde fuerza muy r�pidamente. De todas maneras, tambi�n son muy peligrosas y sus destrozos son muy cuantiosos.

Textos explicativos tomados de los libros:
Introducci�n a la Meteorolog�a, de Fernando Llorente Mart�nez, publicado en la revista de internet RAM.
Manual del Observador de Meteorolog�a, de J. M. Jans� Guardiola, publicado por el Ministerio de Trasponte, Turismo y Comunicaciones, 2� edici�n, INM 1968.