En este libro autobiográfico, el autor nos relata su andadura profesional en el campo de la Meteorología. En una de las solapas del libro, Ángel Rivera hace suya la siguiente frase de George P. Cressman –pionero de la Predicción Numérica del Tiempo y antiguo Director del National Weather Service de EEUU–: “He dedicado mi vida profesional a la búsqueda de dos objetivos: aprender a integrar dos ecuaciones simultáneas en derivadas parciales y a imaginar qué hacer con las respuestas. Fue divertido y haría algo parecido de nuevo.”A lo largo de 62 pequeños capítulos, el autor describe desde un punto de vista muy personal sus vivencias meteorológicas desde niño hasta su jubilación en la Agencia Estatal de Meteorología, en 2012. Durante treinta y ocho años ha sido testigo de la evolución de la meteorología española sobre todo en lo que se refiere a la predicción del tiempo. A lo largo de sus páginas, el libro recuerda situaciones atmosféricas históricas, evoca personajes y anécdotas y, sobre todo, muestra como se llevó a cabo la importante evolución en las actividades de predicción en el antiguo Instituto Nacional de Meteorología durante las décadas de los 80 y los 90.El prólogo corre a cargo de Manuel Palomares, de donde extraemos el siguiente comentario: “Quien esté interesado en un tema ciertamente especializado como es el desarrollo interno de nuestro servicio meteorológico –AEMET–, disfrutará sin duda con todo lo que sigue a este prólogo, pero además, y aunque su interés no sea tan directo, apreciará la influencia positiva que tiene en toda actividad la actitud misma de quienes la ejercen. Si el interés básico se dirige sobre todo a ellos mismos, el progreso es muy poco probable y sus instituciones pasan por las etapas más mediocres, pero si la vocación, la visión desprendida y el entusiasmo predominan, se puede llegar a logros incluso imprevistos. Las memorias profesionales de Ángel Rivera dan sobrada cuenta de ello.”El autorÁngel Rivera es meteorólogo del Estado. Durante 38 años ha trabajado en la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET/INM), hasta su retiro voluntario en marzo de 2012. Tras pasar entre otros destinos por los aeropuertos de Almería y Girona, fue desde 1990 hasta 2005 jefe del Área de Predicción, donde trabajó en la organización del entonces nuevo Sistema Nacional de Predicción y de los Planes de Avisos Meteorológicos. A partir de esa fecha, y hasta su retirada, ha sido responsable de Comunicación y portavoz de AEMET. En la actualidad, además de desarrollar una amplia actividad en las redes sociales sobre temas meteorológicos, es el Presidente de la Asociación de Comunicadores de Meteorología (ACOMET), de la que es miembro fundador.
Esta entrada se publicó en Libros y Revistas en 01 Oct 2013 por Francisco Martín León
