Tormenta de polvo de origen no africano en la península Ibérica

Fecha: 14 de noviembre de 2007 Autor: Redacción de la RAM- diversos medios de Aragón Palabras clave: polvo no africano, MODIS, visibilidad, cortes de carreteras. No es la primera vez que se ha tratado en la RAM el tema de las irrupciones de polvo cuyo origen no es desde el desierto. En determinadas zonas de Alaska, por ejemplo, los vientos intensos de componente norte barren los valles fluviales donde el material pequeño y fino es elevado, formando tormentas de polvo que se hacen más patente cuando llegan al Pacífico. Ver por ejemplo en RAM 46: http://www.tiempo.com/ram/numero46/dustalaska.asp

Algo parecido ocurrió en el Valle del Ebro el 14 de noviembre de 2007 durante el día. Ver figuras 1 y 2. El cierzo sopló con intensidad y persistencia en la zona, bajo una inversión muy marcada.
Figura 1. Imagen del sensor MODIS en falso color del satélite Agua de la NASA. Nótese el polvo en suspensión en la zona aludida. Fuente NASA.
Las fotos de diversos medios en diversas poblaciones, carreteras, etc., ponen de manifiesto la intensidad e importancia del evento, sobre todo por la baja visibilidad que generó. Pero ¿por qué ocurrió? ¿Qué causas fueron las que se dieron ese día y no otros?
Figura 2 Ídem que el caso anterior para el Terra. Fuente NASA.
La confluencia de varios factores es llamativa. Estos se dieron en el mismo instante y lugar. He aquí algunas razones básicas y la presencia de ingredientes para la generación de las tormentas de polvo:

- Viento en capas bajas intenso. El cierzo fue muy considerable y constante. La capa de aire por debajo de una inversión marcada estaba afectada por un viento moderado capaz de mantener y concentrar debajo de ella todo el material que arrastraba.

- Sequía pertinaz. Ausencia de lluvias en un periodo muy amplio en grandes áreas del Valle del Ebro.
- Falta de cobertura vegetal. Ausencia de una amplia cobertura vegetal en otoño que hubiera mantenido el polvo y la tierra fina aferrada en el suelo y protegida del viento.
- La canalización perfecta del viento en el valle. Además, su desembocadura al mar facilita su detección por satélite.
La ausencia de nubes que permitió ver la polvareda generalizada en las imágenes de satélite.
Figura 3. Sondeo del 14 de noviembre de 2007 de Zaragoza a las 12 UTC. Fuente Universidad de Wyoming.
Se muestran algunos recortes, fotos y titulares de prensa.
Recortes de Periodicos de Aragón
Diario de AltoAragón
Además, el viento también dificultó la circulación de vehículos en la A-23, en Almudévar, entre los kilómetros 561 y 564 en los que se registraron rachas fuertes de viento y tormentas de polvo. Fuentes de Tráfico indicaron a este periódico que estas incidencias se registraron de modo similar en la N-II, a la altura de Candasnos, del kilómetro 428 a 394, donde hubo vientos racheados y tormentas de polvo.
Titulares de El Periódico
El viento huracanado provoca el caos en las carreteras aragonesas
Un accidente en Bujaraloz produjo retenciones de 37 kilómetros en la N-II.La ´tormenta´ dificultó los trabajos de extinción de un incendio en Sos.
15/11/2007 EL PERIÓDICO
Foto: ARAGÓN TELEVISIÓN
El viento provocó una tormenta de polvo en Los Monegros que afectó a la A-230, que fue cortada. Foto: ARAGÓN TELEVISIÓN
Las fuertes rachas de viento que afectaron ayer a diversas zonas de la capital aragonesa obligaron a cortar algunas carreteras a la circulación de vehículos y fueron la posible causa de accidentes de tráfico que dieron origen a largas retenciones y atascos. En varias comarcas de Huesca y Teruel persistía a última hora de ayer la alerta amarilla.
El accidente más espectacular se produjo en la carretera N-II, donde colisionaron por alcance tres camiones y un turismo a las dos de la tarde a la altura del kilómetro 386,300, en el límite de los términos municipales de Bujaraloz y La Almolda.
Como consecuencia de este accidente, solo se registró un herido leve, un camionero que quedó atrapado por el pie en la cabina y que tuvo que ser excarcelado por los bomberos de Caspe. Asimismo, el conductor del turismo resultó con una erosión en el pecho por la presión del cinturón de seguridad y fue trasladado al hospital Miguel Servet.
Sin embargo, tanto las labores de excarcelación del camionero como la retirada de los vehículos implicados obligaron a cortar la carretera hasta que la Guardia Civil estableció desvíos por la autopista AP-2. Las retenciones afectaron a 37 kilómetros en ambos sentidos de la autovía.
Asimismo, la carretera A-230, entre Caspe y Cariñena, fue cortada al tráfico desde las 12.15 hasta las 20.00 horas a causa de una tormenta de polvo que impedía totalmente la visibilidad y que provocó diversos accidentes, que afectaron a siete vehículos, aunque en todos ellos solo hubo daños en las carrocerías y ningún lesionado.
A la zona se desplazaron trabajadores de las brigadas de carreteras del Gobierno de Aragón, bomberos de Caspe y efectivos de la Guardia Civil de Tráfico, para despejar la carretera y proceder a su limpieza. Se establecieron desvíos por Fraga (N-II) y Escatrón (A-221).
El viento también condicionó la circulación en otras vías de Zaragoza y Huesca en las que era necesario circular con precaución. Los lugares afectados fueron la A-23, en Almudévar; la N-II, en Candasnos y en Gelsa; y la AP-2, a la altura de Pina de Ebro.
INCIDENTES El vendaval también provocó incidentes en diversas localidades de las tres provincias. En Sos del Rey Católico causó dificultades a los bomberos que acudieron a apagar el incendio en una vivienda ubicada fuera del casco urbano. El siniestro se produjo a las 14.30 horas y al lugar se desplazaron dos autobombas, una nodriza y un vehículo ligero.
En Alcañiz, los bomberos tuvieron que asegurar un tejado de chapa ante el riesgo de que se desprendiera por el viento. Fue preciso cortar al tráfico desde las 12.00 hasta las 16.00 horas una parte del vial entre la ronda de Belchite y la urbanización Santa María por el peligro que ofrecía el citado tejado.
80 kilómetros/hora
Es la velocidad del viento huracanado registrado ayer en distintas comarcas aragonesas y que provocó la declaración de alerta amarilla en diversas zonas de Teruel por parte del Instituto Nacional de Meteorología partir de las 13.00 horas. Las más afectadas fueron la sierra de Albarracín y la cuenca del Jiloca. Las rachas también fueron muy fuertes en las sierras de Gúdar y del Maestrazgo y en el Bajo Aragón, donde la velocidad del viento alcanzó los 70 kilómetros/hora. Inicialmente, estaba previsto que la alerta cesara a partir de la medianoche. El vendaval también afectó a diversas zonas de Huesca, como Almudévar y Candasnos, donde las autoridades aconsejaron circular con precaución, y obligó a declarar la alerta amarilla en muchas zonas del Pirineo, donde la nieve alcanzó un grosor de cinco centímetros. En Zaragoza, las afecciones fueron menores y se redujeron a algunos puntos limítrofes con la provincia de Teruel. En el casco urbano de la capital el viento sopló con fuerza, pero el Cuerpo de Bomberos no registró ninguna salida por esta causa.
Esta entrada se publicó en Noticias en 17 Dic 2007 por Francisco Martín León